Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
Mostrando entradas con la etiqueta dar y darse. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta dar y darse. Mostrar todas las entradas

lunes, 23 de noviembre de 2020

SEGUIR NO SIGNIFICA CUMPLIR

Lc 21, 1-4

Seguir a Jesús y ser buen discípulo no sería difícil ni presentaría muchos obstáculos si todo consistiera en cumplir preceptos y normas. El discípulo se acostumbraría a una disciplina y a una norma de vida que no le supondría mayor obstáculo que el de someterse a una disciplina que no le supone mayor exigencia. La dificultad se presenta cuando se acaban las recetas y se abre el horizonte del amor.

Un amor que exige darse; un amor que exige perdonar; un amor que exige compromiso; un amor que exige humillarse. Un amor, en definitiva, que no exige medida , sino que exige plenitud. Un amor que se entiende desde el despojo de ti mismo, de salir de tus egoísmos para darte plenamente.Un Amor como el que te dio y te da cada día Jesús.

Es entonces cuando aparece la dificultad y cuando todo se pone difícil. Y descubres que necesitas la asistencia y el auxilio del Espíritu Santo. Porque, una cosa es segura, sin Él no conseguimos nada.Todo es obra y Gracia de Dios pero, Él ha querido que nosotros colaboremos con su Gracia. Nos ha dado unos talentos y una libertad para elegir seguirle libremente, y ese es nuestro gran tesoro, tener esa posibilidad y aprovecharla abriéndole nuestro corazón. Así lo hizo aquella viuda pobre dando todo lo que tenia, y así también debemos hacerlo nosotros pero, claro, contando con la Gracia de Dios, porque solo no podemos.

Y es eso lo que te pedimos, Padre nuestro, la Gracia de renunciar a todo aquello que nos esclaviza y nos impide seguirte dándote todo nuestro amor. Amén.

sábado, 6 de junio de 2020

ES LO QUE HOY TE PIDO, SEÑOR.

Evangelio Marcos 12, 38-44 Del Santo Evangelio según San Marcos En ...
Mi oración de hoy se puede expresar en pocas palabras: "Ayúdame, Señor, a darme y no quedarme solo en dar". Porque, entiendo, Señor, que el verdadero amor se da sin límite y eso implica a toda la persona, no a  algo de los bienes de esa persona. Porque, al menos a mí me sucede, experimento que doy, pero, ¿me doy? En eso tengo más dudas, y como quiero amar como lo haces Tú, mi Señor, te pido hoy que me des un corazón generoso con el que pueda, no sólo dar, sino darme.

Y te lo pido, Señor, porque soy consciente de mis debilidades y egoísmos. Mi primera inclinación es dar algo de lo que tengo, pero me cuesta más darme. Confieso que quiero hacerlo y me he esforzado en ello. Sinceramente no sé si lo he logrado en algunos momentos y quiero, Señor, que Tú me lo aclares y me tranquilices, porque, ¿de qué me sirve dar si realmente te estoy negando darme?

De algo si estoy seguro, de mi inconstancia y de mis inclinaciones a no darme y a negarme. Me conformo con colaborar y nada más. Y eso me preocupa en muchos momentos. La viuda pobre que puso sus reales en la bandeja me cuestiona y yo quiero también, como ella, darte todo lo que tengo y soy. Pero, me siento impotente y pobre e incapaz de poder hacerlo. Necesito ese empuje del Espíritu que me ayude a dar ese paso definitivo y de experimentar que me abandono en tus Manos sin más condiciones.

Gracias, Señor, por ir transformando mi corazón, poco a poco, día a día, en un corazón condicionado a tu Voluntad y abandonado en tus Manos hasta el punto de dejar todo lo que soy y tengo para que Tú, mi Dios, lo distribuya y lo repartas según tu Voluntad. Porque, eso, Señor, es lo que realmente importa, darse hasta el extremo de entregar la vida si hace falta. Amén.

lunes, 26 de noviembre de 2018

TODO EMPIEZA POR LO PEQUEÑO


Resultado de imagen de Lc 21,1-4
En muchos momentos lo pequeño pasa desapercibido. Todos queremos contemplar lo grande y hacer grandes cosas, sin embargo no nos damos cuenta que todo empieza por lo pequeño. Incluso, cuando hacemos algo grande y estamos en los inicios no apreciamos lo importante que es empezar bien y plantear la estructura de lo que va a ser una gran obra.

Todo lo grande se compone de pequeñas cosas que se van uniendo y conformando para formar algo grande. La historia está formada por pequeños acontecimientos que van tejiendo el hilo y los hechos de una gran obra. Y dar lo pequeño cuesta mucho trabajo, porque no se le da la debida importancia ni el debido valor. Lo que había dejado aquella viuda pobre no había llamado la atención. Incluso se valoraba poco y no tenía ninguna importancia.

Sin embargo, lo que dejaban otros, grandes cantidades, sonaba mejor y se le daba gran importancia. Otra ves el mundo valora la apariencia y lo que en realidad no tiene gran valor. Porque, dar de lo que te sobra no significa mucho ni supone ningún sacrificio. Simplemente tienes un poco menos, pero te sobra suficiente para vivir. Pero, dar de lo que tienes y necesitas es algo más duro y costoso, porque te exige sacrificio y privación. Duele dar de lo que necesitas y eso significa compartir.

Y fue eso lo que hizo aquella viuda pobre, y lo que también nosotros pedimos hoy al Señor. Sabiduría, voluntad y fortaleza para realmente darnos y dar de lo que tenemos y nos hace falta. Se trata realmente de compartir y de despojarnos de lo nuestro, de lo que necesitamos para vivir y compartir con los que carecen y no tienen para vivir. Y todo hecho desde la verdad y la justicia.

Pidamos, eso, sabiduría para saber compartir y darnos y fortaleza para despojarnos de nuestros egoísmos y ambiciones y de nuestro afán de riquezas, de poder y comodidades. Danos, Señor, la luz de saber elegir cuando realmente debemos de dar y darnos y de hacerlo con generosidad y verdadero amor. Amén.

viernes, 9 de febrero de 2018

UN PROBLEMA CANDENTE

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS.


Es algo que lleva tiempo pasando, muchas personas están alojadas en residencias. No son aptas para vivir en familias, pues necesitan una serie de atenciones que la familia moderna no puede darles. Me para en eso de moderna, pues me llama la atención. La modernidad está siempre relacionada con el progreso y los adelantos. Pero, en esto de las familias no parece del todo un adelanto.

Hay muchos ancianos, que ya no se sabe a que edad se es anciano, que sufren la lejanía y separación de sus familias. No se les aguantan en la familia, porque la familia tiene que viajar, tiene que descansar, tiene que divertirse, y el anciano no aguanta ni soporta ese ritmo. Ya no sirve ni para cuidar y quedarse al cargo de otros más pequeños, pues se han hecho grandes. Ahora, el tracto es él y ya no sirve. Mejor, lo apartamos y lo ponemos en una buena residencia.

Pero, no se trata de comodidad, ni de estar bien atendido. Se trata de la familia, mi familia. No se puede establecer la residencia en casa. No se puede nadie dar al que se dio antes en su juventud. ¿Cómo se entiende el amor?  ¿Se recibe, pero no se da? ¿O se da y se recibe? ¿Dónde están las prioridades? ¿Se pone primero el viajar, el divertirse, el trabajo y la producción que la atención al enfermo? 

Son cuestiones candentes que nos desafían y miden nuestro amor, y sobre todo nuestra fe. Porque, cuando se trata de amar hay que estar dispuesto a morir. Y morir significa dejar todo lo que aparentemente nos parece que nos va a llenar de éxito, gozo y felicidad, y buscar el bien del otro, desechando lo que egoístamente nos atrae y nos gusta, por lo que realmente esconde el verdadero gozo, felicidad, que nos dará lo que buscamos y queremos. Nuestro mayor éxito, la Vida Eterna.

Eso es lo que realmente nos enseña el Señor y lo que, hoy, Dios mío, te pedimos. Danos un corazón generoso y entregado al servicio por los demás. Un corazón que se preocupe por servir y darse. Un corazón que no se acomode ni se acostumbre a pedir, pero no a ser y hacer. Sácanos, Señor, de esa peligrosa rutina y comodidad. Amén.