Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

jueves, 22 de junio de 2017

CAMINO DE PERDÓN, NO HAY OTRO

Gracias, Señor Jesús, por dejarnos esta hermosa oración con la que dirigirnos al Padre. A ese Padre que Tú nos revelas y del que nos habla y nos dice que tanto nos quieres. Ese Padre Bueno con el que nos enseñas a relacionarnos. Gracias, Señor Jesús por enseñarnos  a relacionarnos con el Padre Bueno sin divagar ni pedir cosas que, quizás no son necesarias para nuestro bien. Gracias, Señor, por unirnos  fraternalmente como hermanos e hijos del Padre, para que, unidos, podamos todos santificar su Nombre y vivir en y para su Reino.

Padre, te pedimos, por los méritos de tu Hijo Jesucristo, que vivamos en tu voluntad, y te pedimos que nos llenes de tu Gracia, para poder superar todas las dificultades y obstáculos que se nos presentan en nuestro camino. Danos hoy, Señor, la fortaleza necesaria que necesitamos para conseguir y satisfacer nuestras necesidades materiales, sin permitir que estas desplacen a la espirituales, porque como Tú nos dejaste claro en el desierto, " no sólo de pan vive el hombre, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios"-Mt 4,4-.

Pero el reto de nuestro obrar reside en tu Miserícordia, Señor. Tú nos perdonas todos nuestros pecados. Nos resistimos a tu llamada, a tu espera y paciencia, y te devolvemos indiferencia, rechazos y olvido. Sin embargo, Tú, Señor, mantienes siempre tus Brazos abiertos a nuestro regreso y conversión. 

Por eso, Señor, la prueba del perdón es actuar y perdonar tal y como Tú nos perdonas. Danos esa Misericordia, Padre, para ser capaces de perdonar como tu Hijo, nuestro Señor, nos ha enseñado a perdonar. Amén.

miércoles, 21 de junio de 2017

LA INTENCIÓN SE ESCONDE EN EL CORAZÓN

Hoy, Señor, te pedimos que nos transformes nuestro corazón en un corazón puro y bien intencionado. Sabemos que, muchas veces, incluso de forma inconsciente, hacemos las cosas para ser visto. E incluso para que se nos reconozcan nuestros méritos. Lo descubrimos en nuestros deseos de ser alabados y considerados. Y lo reconocemos, porque es inherente con nuestra condición humana, y no nos libramos de experimentar y sentir esa tentación de que nos miren y nos rindan alabanzas y honores.

Por eso, Señor, consciente de nuestros pecados, te pedimos hoy que nos liberes de esas tentaciones y nos cambie nuestro corazón. Danos un corazón limpio, bien intencionado y que no busque alabanzas, méritos y honores. Un corazón que actúe por amor y de forma desinteresada. Un corazón que no busque honores ni premios, ni tampoco recompensas o favores. Un corazón abandonado en Ti y escondido en Ti, Señor.

Tratemos de ser generosos y dados en lo oculto, o, al menos, con esa buena intención de no aprovecharnos para ser visto y destacados. Observamos que en los grupos y comunidades destacamos y tratamos de ser generosos, y, por el contrario, en la soledad o cuando no somos observados nos retraemos. Y eso, al menos en mi humilde opinión, no debe retrotraernos ni desanimarnos. Al contrario, debemos reconocerlo y pedirle al Señor que nuestros actos sean cada vez más puros, más desinteresados, más por amor y para Gloria del Señor, y no pensando en nosotros.

Y sucede que algunas veces ocurrirá delante de la multitud, y otras veces donde sólo estás tú y el otro.  O rezarás en la celebración litúrgica o en el silencio y soledad de la capilla. Lo importante y verdadero debe ser que, hagas lo que hagas, tu publico debe ser Dios. Y eso es lo que debe interesarnos. Dios nos ves las veinticuatro horas de cada día, y sabe de nuestras verdaderas intenciones. Por eso, no tratemos de engañarnos creyendo que podemos engañarle. Sólo nos engañaremos nosotros, que recibiremos nuestra recompensa y ya no podremos ser recompensados por nuestro Padre Dios. Y esa es la única y válida recompensa que interesa. Amén.

martes, 20 de junio de 2017

SÓLO EN EL ESPÍRITU SANTO

No nos empeñemos en buscar caminos, métodos, hábitos y cientos de estrategias y medidas para lograr amar, no sólo a los familiares y amigos, sino también a los enemigos. No podemos descartar que todo puede ayudar. Y buenas costumbres, ambientes y métodos o estrategias nos pueden servir de eficaz ayuda para capacitarnos en amar a todos. En especial a los enemigos.

Pero, lo único y principal es permanecer injertado en el Espíritu Santo. Él ha venido para acompañarnos en nuestro camino de cumplir la Voluntad de Dios. Y esa Voluntad no es otra que la de amar. Amar, sobre todo, a los enemigos. Por lo tanto, no emprendamos nada sin su concurso y siempre dejándonos llevar por su ritmo y su dirección. Pidamos su auxilio y su eficacia; pidamos sus dones: sabiduría, entendimiento, consejo,  inteligencia, ciencia, piedad y temor de Dios. 

Pidamos abrirnos a su acción y seguir sus impulsos. No es fácil y muchas veces no entendemos su Voluntad, e incluso nos parece contraria a nuestros deseos y proyectos. No es fácil. La historia nos dice que muchos no le reconocieron de entrada y siguieron otro camino, aunque después se avinieron a sus mandatos. Porque, siempre será lo mejor para nosotros.

Por eso, ahora, desde este rincón y unidos en oración, nos unimos espiritualmente para pedirle todos juntos y a una sola voz, que nos dé la sabiduría y la fortaleza para no apartarnos de Él y seguir sus indicaciones. Aunque nos parezcan duras y no entendamos. Danos, Señor, serenidad y paciencia para saber esperar y aguardar perseverantes tus mandatos y llevarlos a su cumplimiento. Amén.